lunes, 9 de enero de 2012

El llanto de un bebé me despierta a media noche. Voy corriendo. Sólo es una pesadilla.
Intento dormirle y vuelvo a mi cama caliente para conciliar de nuevo el sueño, mientras tú, en un gesto de amor, me arropas con us brazos y me invitas a caer de nuevo en el sueño...

A veces en la vida nos precipitamos en nuestras decisiones. Otras veces simplemente sentimos una corazonada que nos incita a hacer algo, da igual cuando y donde, pero nunca puedes dudar el con quién.

Solo sé que quiero, y no me importa esperar, porque quizás ahora no sea el momento, es cierto, pero esto, que para mí es lo más importante que voy a hacer en mi vida, quiero hacerlo contigo. Lo tengo claro.

Es posible que a veces me llames loca, y posiblemente lo esté, pero hay algo que me dice que eres el amor de mi vida y no quiero dejarte escapar por nada del mundo.

Quiero quererte y quiero despertarme mil noches mientras intento hacer conciliar el sueño a esa pequeña criatura que nace de mis entrañas.
Me da igual esperar. De momento me conformo con tus brazos arropandome cada noche que estás conmigo y que llenas mi cielo de estrellas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario