miércoles, 15 de agosto de 2012

Fin del bucle

Apenas un dedal, con un bonito dibujo. Es lo que me queda.
Tan poco y a la vez tanto.

Lo miro, lo miro y lo vuelvo a mirar, mientras, de tenerlo agarrado entre mis dedos, la pintura se va desgastando hasta que apenas se ven unas pocas letras.

Al sentir su tacto de porcelana, fino y delicado cual obra de Chopin, me transmite a aquella habitación, donde tú y yo, después de llantos, reproches y muchas más cosas, nos besábamos sin fin, y sin pensar en lo malo, si no en el amor que nos envuelve.
Nada en la habitación es relevante, solo tú y yo, y ese beso que me engancha cual droga. Una pasión que raya lo enfermizo, un amor de futuro, una casa, un hogar, una vida junto a ti.

A veces palpas la suerte. Otras, incluso puedes coger un pedazo. Aunque no lo diga, ni lo demuestre, ni te lo haga saber, soy muy afortunada, por tenerte día a día en ese beso infinito. Confío en mi suerte, y sé que todo irá bien.




Siento mucho flagelarte, herirte.
Si alguna vez pudieras sentir lo que siento, 
si pudieras navegar en el mar de mis deseos, 
entenderías que no hay vida
más allá de ti y de mi, 
y aunque no lo creas lo intento
y mis sentimientos se marchitarán
con mi amor por ti.
Tú justificas mis sonrisas, 
mi despertar y mi morir. 
Si no te tengo, no muero
porque no he vivido si no es por ti.


De mi para ti.



miércoles, 27 de junio de 2012

El milagro de la roja

En ese preciso instante todo el mundo se paraliza, contiene la respiración esperando un milagro. Sufre, suda lágrimas de angustia por los poros colmados de deseo.
Un instante, apenas unos segundos.
El futuro decidido en un suspiro.
La ilusión, el anhelo, la ambición culminada en un grito de rabia audible a kilómetros.
Explosión de alegría, felicidad, abrazos, sonrisas.
Rabia expulsada en un gesto que envuelve toda la escena...

Es curioso como dos colores provocan en todo el mundo la misma reacción. Es curioso ver cómo se olvidan las diferencias bajo una bandera, unos colores, una ilusión: ganar.Es curioso ver como nunca creemos en los milagros y esta vez rogamos al cielo los cumpla.

Es curioso. Somos España.

Parada en el tiempo, en un preciso instante. Anclada en el pasado.
El reloj se detiene, para su parsimonia eterna.
Los pelos de punta y la carne en vivo.
Dolor, recuerdo, ternura.
Sólo eso...

miércoles, 25 de abril de 2012

Fuiste y serás

Fuiste y serás remanso de olvido, eterno letargo de soledad, cruel consuelo. Fuiste y serás lágrimas púrpuras que versean mis poros. Serás recuerdo, mas no agonía en el inverso horizonte.
Fuiste y serás partículas de alegría, borbotones de tristeza.
Fuiste y serás memoria, historia, vida.
De momento sólo eres lo que fuiste.
Es dificil labrarse el camino de lo que llegarás a ser.

martes, 17 de abril de 2012

Caminante en un mar de nubes

Consigo llegar a la cumbre, y, con miedo, miro hacia abajo sintiendo vértigo. Me ha costado mucho llegar ahí, y sin embargo siento que el camino no es tan largo. El oxígeno me falta. Siento un frío gélido en la cara, como constantes bofetadas que me devuelven a aquel asombroso paisaje.

Miro el horizonte, sólo lejanía, nubes, infinidad acongojante y miedo.

Amar es enseñar, perdonar, olvidar, sentir, querer, sufrir, odiar, llorar, reír, añorar, vivir y morir, eternidad e infinidad...amor es el horizonte lejano. Hoy por hoy, miedo.

miércoles, 4 de abril de 2012


No puedo mirar al camino que me queda por recorrer, si a cada paso que doy recuerdo los tropezones que he tenido. No puedo levantar la mirada si me preocupa el firme. No puedo ver luz cuando la oscuridad me rodea.

Mi espalda se apolla en una pared mullida, acolchada. Mis brazos luchan por liberarse, mientras, cada vez que lo hago, más prisión encuentran. Mis piernas sin fuerza intentar erguirse y caigo, caigo constantemente al suelo, cada vez haciéndome más daño.

Cuatro paredes, un pequeño ventanuco y una puerta. Sólo eso.

La luz que entra me ciega con esa albicidad inmensa. Apenas puedo abrir los ojos, y la verdad, es que tampoco tengo fuerzas para abrirlos.

Mi mente divaga, sufre, piensa en el dolor. ¿Por qué? Si yo no hice nada...

El espacio es grande, y aún así mi alma está ahogada. No sé que hacer. No me quedan fuerzas ni para llorar. Sólamente lucho por olvidar, por resistir.

Me dejaste el alma deshecha, rota, herida, y yo no supe levantar, volví a caer, haciéndome todavía más daño.

No sé qué deparará el futuro. No quiero saberlo. A pesar de todo quiero ser feliz, a tu lado.
¿Por qué?

Perdón. Qué bonita palabra. Quiero aprender su significado, y perdonar, y olvidar y resistir, pero no puedo yo sola.

Despierto empapada en sudor. Abro los ojos y la luz del sol me ciega. ¿ Es sólo una pesadilla? Sí, por favor...

martes, 6 de marzo de 2012

El agua se derrama...y la flor se seca. El jarrón está rajado.

Día a día necesitamos alimentar nuestra vida con momentos, con instantes que nos llenan, nos alegran, nos apasionan.

Suelo ser una persona optimista y alegre, pero llevo un gran peso sobre los hombros que me impide alzar la cabeza y disfrutar de las vistas, de la luz.

Está claro que por mucho que te esfuerces no puedes ser el primero en todo, pero la verdad es que me duele ser el premio de recompensa en algo que de verdad me importa. No puedo hacer nada. Siento que por mucho que haga esto no depende de mi.
No sé que me falta ni que me sobra, solo sé que soy así, en lo bueno y en lo malo, con mis defectos y mis virtudes.

Necesito completar mi vida. Estoy feliz, sí, pero siento la necesidad de llegar a algo que me queda pendiente. El problema es que no sé lo que es.

Es duro nadar contracorriente, y aún así, por cabezonería o por orgullo, o simplemente porque lo siento, sigo haciéndolo.

No es fácil. Aún así espero que la vida llegue a darme lo que con tanta impaciencia espero.

lunes, 5 de marzo de 2012

25 Febrero 2012

Confío en mi suerte. Miro tus ojos color miel y sonrio sin darme apenas cuenta.
Agarras mi mano y acaricias con avaricia mis dedos. De repente me abrazas haciéndo estremecerme de amor.

Cenamos, saboreamos lentamente el sinfín de sinfonías al paladar mientras irremediablemente el tiempo se va consumiendo.

No sé si será el momento o quizás que el vino se me está subiendo a la cabeza, pero ese hormigueo irresistible me recorre el cuerpo. Junto tus labios carnosos con los mios y nos fundimos en un beso, único. Dos palabras luchan por salir de mi boca. Miro la luz ténue del flexo y sin darme apenas cuentas, en un exhalo, susurro mi reconcomo: Te Quiero.

La luna brilla llena, y un manto de estrellas acompañan su soledad. Cientos de edificios me rodean forzándome a volar al horizonte despejado. En mi bolsillo apenas unos euros y algún papel, en mi corazón tu recuerdo y tu sonrisa.

Felicidades mi vida.